lunes, 19 de marzo de 2012

Ischigualasto, Talampaya y los ricos vinitos cuyanos



De vuelta al ruedo amigos. He salido por fin de Buenos Aires a tomar un poco de aire andino por una semanita.


Siguiendo su principio de legarnos conocimiento y cultura en lugar de bienes materiales, mi madre nos regaló a mi hermano grande (que también está de visita) y a mi un viajecito a San Juan, La Rioja y Mendoza para que vayamos los 3 a conocer un poquito de la "Región de Cuyo". Esta es la zona del país productora de vino por excelencia (Mendoza tiene actualmente más de 1.000 bodegas) así como de olivas y frutos secos, aparte de frutas en general. 

Más allá de estos productos (y aunque habrá algunos que crean que lo otro solo era una tapadera) nuestro objetivo principal era visitar 2 parques nacionales a los que hace rato les tenía yo ganas: Ischigualasto (también conocido como Valle de la Luna, en la pcia. de San Juan) y Talampaya, su correlativo en la prov. de La Rioja,  ya que están separados por menos de 100 kms.  y pertenencen a la misma tungada geológica digamos.

Recién aterrizados en San Juan capital fuimos de visita a una bodega-museo de origen italiano, la Graffigna, ahora vendida a capitales franceses. El vino que nos dieron a degustar no nos mató mucho, pero la visita (en exclusiva para nosotros 3) valió la pensa solo por el placer de inspirar esos aromas a barrica y vino, asentados desde años. Yo me imaginaba mirando las fotos de época lo que debería haber sido para esos tanos recalar ahí a fines del siglo XIX, en el literal medio de la nada, con los Andes a un costado, en un terreno sísmico a más no poder y meterse a hacer vino, procurándose cada gota de agua a través de las acequias. Qué ganas, eh!

Fede en postura gauchesca..
Graffigna, detalles

De ahí fuimos a cumplir el hito materno: visitar la casa natal de Domingo Faustino Sarmiento, uno de los "padres de la patria" al que respetamos por el hecho de ser el fundador de la escuela pública en el país. Personalmente no es que me apasionara pisar esa casa, pero leer fragmentos de sus obras, ver la lucidez y ganas de progreso que tuvieron en otra época algunos líderes de este país es para llorar, en serio.. Sobretodo comparándolo con el panorama actual, claro!!!

Entrando en la casa, con la famosa higuera de Doña Paula al fondo. Abajo, con el prócer..

Por fin al día siguiente empezamos a tirar hacia Valle Fértil, el pueblito base para visitar Ischigualasto, que esta a 260 kms de la capital.
De camino, y en un flashback del kitsch indio, pasamos por una especie de pueblo creado alrededor de una leyenda popular de la zona: la Difunta Correa. Cuenta la historia que unos baqueanos encontraron a una mujer muerta en el camino (había muerto de sed) pero con su bebecito vivo enganchado a la teta, de la siguió saliendo leche aun habiendo muerto la madre. Si la historia en si les puede parecer bizarra, cuando ven las estatuas del chiringuito que se montaron en los alrededores lo flipan!! Pasen y vean..

Ofrendas para conseguir casa
Acá abajo, las botellas que le dejan llenas de agua para aplacar su sed...
Y acá, el altar principal!!!

 Y ahora por fin si, llegamos a Ischigualasto, el primer parque. El lugar que abarca no es pequeño (¡275.000 hectáreas!) con lo cual te obligan a hacer la visita en vehículo, en el que se hace un circuito de unos 40 kms. Tampoco es que vayas solo, los autos van todos en fila india siguiendo al del guía, que frena en los lugares autorizados y va explicando las formaciones. Realmente es una pasada el lugar, porque la cosa es que cuando se fue conformando la cordillera de los Andes unos 60 millones de años ha, el movimiento levantó toda esa zona y, como muy gráficamente nos explicaron, quedó expuesto a pie de calle todo el Triásico, casi como por capítulos, desde 180 a 230 millones de años de cambios geológicos. De todas formas, aun sin recibir ninguna explicación científico-histórica, el lugar enamora porque gracias a los vientos implacables de la zona las formaciones rocosas que quedaron son loquísimas y sumadas a los colores de los diferentes estratos da como resultado un paraje alucinante.

Vistas de las diferentes etapas geológicas por "código color". 
Abajo, el Valle Pintado
Abajo guanacos, primos de las llamas y las vicuñas, pero con la variante de que escupen, jeje
Más rocas, notarán que me emocioné con el paisaje lunático
Área conocida como "Cancha de bochas" (=petanca en argento)
"El Submarino"

"El Hongo"
Más guanaquitos (es que me gustan..)
Y acá dándole de comer galletitas a los dinosaurios 
(que por cierto los originales no sabemos donde andan pero por los parques no dejaron ná de ná!)

Talampaya es su vecino, geológicamente hermano pero separado por una columna de roca altísima de color rojizo que oficia de frontera provincial. Acá también hay que entrar con vehículo, pero en este caso ya del mismo parque. Ese little detail, sumado a que nos enteramos después que el parque está "concesionado" osease, con todos sus servicios operados por una empresa privada, hace que el precio se dispare, y pase de los 50$ que nos costó Ischigualasto, a pagar 20$ de entrada + 115$ de tour, increíble!! (porque claro, el tour te lo comés con patatas porque en teoría está prohibido ir suelto)..
Yo es en estos momentos en los que hiervo ante la voracidad de parte de mis compatriotas. ¿Cómo puede ser que se terciaricen los servicios de un parque nacional??? Y en caso que suceda, ¿cómo puede ser que ni siquiera se ponga un mínimo control en los precios de entradas, que aparte para los extranjeros (sean bolivianos o suizos) cuestan el doble!! Aparte de que por ejemplo en un parque se hagan descuentos a estudiantes y jubilados y en otro no, en fin, que es Can Pixa esto!! Entiendo que hagan esto de cobrar más caras las entradas en India, donde la rupia está por los suelos, pero ¿acá?? Cuando tenemos los mismos precios que en Europa ya!! Una vergüenza, en serio.
Pero bueno, volviendo a lo lindo, el parque en si también vuelve a ser una maravilla, el cañón de Talampaya es impresionante por donde lo mires, los petroglifos buenísimos, las formaciones loquísimas.. Y la verdad es que siempre los guías que nos tocaron rozaban la excelencia, super informados, con explicaciones clarísimas, amables, simpáticos (faltaba que fueran guapos y eran perfectos! jaja).
Así que he intentado quedarme con la parte buena del recorrido que no fue poca.

Especial petroglifos for Marta
Morteros para el cereal (tal vez)
No son alucinantes los colores???
las paredes del Cañón de Talampaya

De regreso ya en San Juan, y habiendo vuelto a pasar por la casa de Sarmiento para "liberar" un librito de bookcrossing (mother's way of happinness) tomamos un buseto para recalar en Mendoza, la capital del vino argentino. Acá aparte de celebrar el cumple de la Mamma, Fede y yo nos fuimos a hacer una excursión de Alta Montaña que nos llevó hasta el límite con Chile pasando por un punto de avistaje del Aconcagua (el pico más alto del país y de latinoamérica). Ya de vuelta paramos en el Puente del Inca, un paraje que algunos consideran la Puerta Sur del Imperio Inca y donde hay aguas termales naturales y una especie de puente raruno creado por la erosión del agua del río sobre los restos de un glaciar ya desaparecido. También hay una leyenda que cuenta que el hijo de un rey Inca tenía una enfermedad y bajó desde Cuzco hasta allí para curarse en las aguas termales, pero que cuando llegó no había como cruzar. Entonces sus hombres se agarraron unos a otros para hacer un puente humano y así pudo atravesar. Pero cuando se dio vuelta para agradecerles resulta que estaban todos petrificados.. ninuni
Quédense con la que más les guste, yo en este caso prefiero lo de la erosión, qué quieren que les diga..

Camino de alta montaña, a casi 3000 mts.
Abajo, vistas del Aconcagua, que parece chiqui pero tiene 6962 mts!!
Arriba la hermandad hermanil, abajo la fronteriza Argentino-Chilena, Cristo mediante
Para que vean que una es una profesional, y sube a 4000 mts en chanclas, jaja (ventajas de ir en bus..)
Abajo Puente del Inca, otra locura cromático-morfológica
Las vías muertas del tren mendocino, que me dieron para una "sesión"

Y ya para rematar nos fuimos (ya solo los hermanos) a San Rafael, una ciudad a unos 200 y pico de kms al sur de Mendoza capital, para conocer el Cañón del Atuel, otro lugar de renombre de la zona. El recorrido va resiguiendo el cañón formado por el río Atuel, pero como en gran parte está embalsado para las 4 hidroeléctricas de la zona, la verdad no fue tan alucinante como esperaba. O tal vez después de los parques ya la cosa quedaba un poco opacada, no sé yo..

Ya de vuelta pasamos por una pequeña finca familiar, productores de frutas y con algunas viñas. Y qué hermosura los viñedos, por favor!! Ahora están en plena recolección, las uvas rebosan redonditas, las hojas están de los más variados verdes, una gozada!

Aparte que me olvidé de mencionar que todas estas ciudades cuyanas son una maravilla en si por el simple hecho de existir. Toda el área era originalmente casi desértica, solo matorrales de arbustos espinosos y bajos, los únicos supervivientes debido a un clima aridísimo con un nivel de precipitaciones de 200 mll anuales.
Pero con los primeros pobladores inmigrantes, que ya siguieron una idea comenzada a desarrollar por los incas y los indios huarpes, se crea una red de canales y acequias que utiliza el agua del deshielo de las montañas aledañas. Y gracias a esa inteligencia sumada a la paciencia de hormiguita para ir sembrando arbolito tras arbolito, ahora las ciudades son verdaderos oasis en el desierto.

Acequias sanrafaelinas. Abajo, el embalse de Valle Grande y viñas

Y eso gente, espero que les gusten las fotitos, realmente recomiendo la zona si alguien viene a visitar este país, porque no está entre las top ten de los turistas normalmente, aunque encontramos a unos cuantos (claro, de estos pedorros que tienen tiempo porque viajan un año o dos, jeje).

Besotes, los quiero tanto que en la foto de abajo me los imaginé a todos juntitos adentro de la super barrica (¿o creían que era una alegoría a la borrachil???).




4 comentarios:

  1. En este soleado y tranquilo martes, cuando los pensamientos surgen lentos, profundos y dorados por la mañana, ofrecernos este tesoro de sensibilidad y agudeza en la remota lejanía, nos alivia, a los muchos que llevamos una vida limitada a un profesionalismo corto de miras, destinado a convertirnos en especialistas de aperturas obturadas y ciegas, nos ayuda, como decía, a superar las trabas y el peso de la ausencia de contacto directo con espíritus libres como el tuyo.

    Gracias Luz.

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  2. Carles, ets un plasta!

    Luz, a part de la Polinèsia, també m'agradaria que ens fessis de guia per aquests parcs tan al·lucinants! Fer excursions per aquests paisatges és una cosa que no em vull perdre.

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  3. Hija mía: falta ¡¡LA FOTO!! en la que copa en mano degustás los VINOS de Mendoza y San Juan, uno de los placeres que se disfrutan en Cuyo, junto con la cordialidad de su gente y el sol "casi" permanente. Para cualquiera de nosotros, argentinos, siempre es bueno volver a Mendoza, en cualquier estación del año y para los amigos de otros paíse, que esperemos nos visiten, les digo ¡no se la pierdan! Norma Risso (con un año y varias copas de más!)

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  4. Alaaaaa, que petroglifos más poco concurridos, no te sentiste un poco sola viéndolos? jaja
    En fin, que das mucha envidia, como siempre. Anotado para cuando vayamos. Norma, un regalazo!

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